A pesar de su juventud, Messi cuajó un partido extraordinario. Dominó el partido al lado de Ronaldinho, en un Barça de leyenda que terminaró levantando la Champions League ese año en París. Y suincreíble superioridad no gustó nada a algunos de los jugadores del Chelsea, impotentes ante apenas un crío.
Y es que Messi fue ‘cazado’ en Stamford Bridge. Recibió durísimas entradas durante todo el partido, pero especialmente una que pudo acabar en tragedia. Tragedia no sólo para Messi, sino para el fútbol. Y es que, si el argentino llega a tener la pierna apoyada en el suelo cuando Del Horno le asestó la patada, bien podría haber terminado su carrera allí mismo.